“NUEVA MECANICA CELESTE” YA DISPONE DE PROLOGO

“NUEVA MECANICA CELESTE” YA DISPONE DE PROLOGO

5 diciembre

 

El ingeniero y colaborador de este proyecto de investigación y experimentación científica Arturo Rodriguez Palenzuela a redactado el prólogo de este nuevo libro sobre la TID, y su interpretación en el comportamiento dinámico del universo.

Incluimos aquí un extracto de su texto:

En este nuevo libro de Gabriel Barceló, su autor nos invita a indagar sobre la dinámica de los cuerpos en rotación. Nos propone en este texto un resumen de sus interesantes investigaciones, pruebas, deducciones y resultados sobre el comportamiento de la masa sometida a acciones que generan nuevas rotaciones intrínsecas, no coaxiales.

He sido un colaborador de este proyecto desde casi su inicio, y he aportado mis conocimientos matemáticos al mismo, realizando el desarrollo preciso de las ecuaciones enunciadas por Barceló, por lo que escribo con conocimiento de causa, siendo consciente de la tenacidad del autor y de sus otros colaboradores.

Inicialmente, y tras una situación previa de incredulidad, llegué a advertir en el texto, una perfecta armonía y estructura del conocimiento de esos móviles, no estudiados hasta la fecha, al menos con este rigor.

Nos recuerda el autor que partió de una intuición sencilla y poderosa: cuando un objeto que gira, recibe una acción que induce una nueva rotación sobre un nuevo eje, su comportamiento no se limita a «sumar» movimientos, sino que despliega respuestas espaciales complejas: precesiones, y orbitaciones que merecen ser descritas con un lenguaje propio: La Teoría General de Interacciones Dinámicas (TID), concebida por el autor, y en la que propone precisamente ese lenguaje, un marco coherente que explica cómo se acoplan las rotaciones intrínsecas, cómo actúan las nuevas fuerzas o acciones no coaxiales, y qué implicaciones observables tiene ese comportamiento, y ese acoplamiento en la cinemática y en la energía del sistema.

El libro continua con las tesis del autor sobre la TID, y es plenamente coherente con sus textos precedentes sobre esos fenómenos dinámicos, constituyendo la continuación de su libro anterior; Nuevo Paradigma en Física. En los dos tomos de esa obra, se contenía el proyecto de investigación científica llevada a cabo por el autor y el equipo colaborador, en sus últimos cuarenta años, según el afirma, pero yo creo que desde los trece años, cuando recibió la carta de Miguel Catalán, ya inicio sus cavilaciones sobre la mecánica rotacional, por tanto, entendemos que ha trabajado en esta investigación científica durante los últimos setenta y dos años.

Por tanto, su autor nos propone en este nuevo texto , el resultado y resumen de su proyecto de investigación privada, realizado sin medios suficientes, como cualquier particular en familia, pero intuyendo que la dinámica de esa materia, había sido tradicionalmente tratada erróneamente, y sin excesiva critica al descuido matemático de Euler.

Analiza posibles causas de esa anomalía, y propone una nueva interpretación del comportamiento dinámica de la masa, cuando se le suscita a efectuar rotaciones simultaneas no coaxiales, comprobando que sus ideas coinciden con la verdadera conduta dinámica de la materia en la naturaleza, tras realizar reiteradas comprobaciones de esa confirmación de la realidad física.

El autor no llega a entender como la simple autoridad de Euler, impidió la falsación o comprobación de sus ecuaciones, lo que no permitió deducir la confirmación de su error matemático: las rotaciones no coaxiales no cumplen las leyes asociativas o conmutativas matemáticas, por lo que no puede aplicarse el algebra vectorial a las formulaciones con rotaciones no coaxiales. En varios siglos parece que nadie había realizado esa comprobación experimental de las ecuaciones de Euler, hasta que Gabriel Barceló, con su intuición, ha sugerido el posible error, y ha confirmado con sus pruebas experimentales, la incongruencia existente…

La TID se sitúa ahí: no para negar los principios conocidos, sino para aportar una descripción directa y operativa de las interacciones no coaxiales en sistemas con momento angular propio.

Posiblemente el meollo de la teoría se encuentra en el reconocimiento del papel del momento cinético intrínseco existente. Un cuerpo que gira posee un atributo peculiar: el momento angular ligado a su estado rotacional. Cuando una nueva acción incide sobre esa masa, no solo cambia la magnitud o la orientación de ese atributo, pero también se desencadena una evolución espacial, que puede expresarse como precesión inducida y, en muchos casos, como una suerte de autopropulsión direccional…

En una Nueva Mecánica Celeste se propone una versión más realista de la dinámica rotacional, por lo que el libro avanza con un hilo que alterna intuición física, supuestos de comportamiento, formulación matemática y propuestas experimentales. Primero se compone la cinemática de manera explícita: cómo se superponen la rotación propia y el efecto de una acción no coaxial, sobre la velocidad y la aceleración del centro de masas, y de los puntos materiales del sistema.

Esta composición revela que, lejos de tratarse de una «corrección menor», la no coaxialidad introduce términos que redirigen el movimiento resultante. Después, la obra presenta la formulación dinámica, donde aparecen magnitudes y variables generalizadas convenientes para seguir la pista a la energía y al momento angular entre la traslación y la rotación. El lector encuentra así un camino claro: de la geometría del problema, a las ecuaciones que gobiernan su respuesta.

En paralelo, el texto expone propuestas de verificación que convierten la teoría en un programa empírico. Se describen ensayos con rotores y plataformas giratorias sometidas a fuerzas laterales controladas, péndulos adaptados para introducir pares no coaxiales y bancos de prueba donde medir ángulos de precesión, velocidades angulares y trayectorias. La idea es sencilla y fértil: si la TID es válida, ciertos patrones —como desviaciones laterales persistentes o precesiones estables bajo relaciones concretas entre el momento intrínseco, la intensidad de la acción y la geometría— deben emerger de manera reproducible. El lector, ya sea investigador, físico, matemático o ingeniero, obtiene protocolos de contraste que le permitirán discriminar entre las predicciones tradicionales y las de la TID, manteniendo el listón de falsabilidad que exige toda buena teoría física.

Lejos de quedarse en lo abstracto, el libro muestra por qué esa presentación es útil. En ingeniería aeroespacial, la actitud y el control de vehículos con elementos rotatorios dependen sensiblemente de cómo se combinen perturbaciones laterales con la rotación intrínseca; comprender ese acoplamiento ayuda a anticipar y a aprovechar precesiones que de otro modo se considerarían meras «anomalías». En robótica y mecatrónica, plataformas con masa en rotación interna, pueden estabilizarse o incluso generar componentes de movimiento que mejoren su maniobrabilidad, si se gobierna el régimen de interacción no coaxial. Las turbomáquinas y otros sistemas energéticos, por su parte, se benefician de diagnósticos que tienen en cuenta desviaciones transversales inducidas por esfuerzos no alineados, explicando vibraciones o trayectorias de operación. Y, en la dinámica planetaria, la TID ofrece un modo de reinterpretar el comportamiento dinámico del universo, con sus precesiones, orbitaciones y resonancias, allí donde la rotación propia de los cuerpos es un actor principal en escena.

Conviene insistir en que la TID no nace para oponerse a la mecánica clásica, sino para describir una física desconocida, o al menos, para iluminar un territorio que con frecuencia se abordaba a través de artificios conceptuales…

El lector encontrará también un glosario implícito que se va desplegando a medida que avanza la narración…Una virtud práctica de la obra es su vocación de manual de trabajo. Cada capítulo deja sobre la mesa criterios y medidas que el lector puede replicar… Ese enfoque invita a pasar de la lectura a la experimentación con rapidez, acercando el laboratorio al tablero de diseño…

Al final, el valor diferencial del libro es doble. Por un lado, ofrece una síntesis conceptual que permite entender, de un vistazo, por qué ciertos comportamientos «extraños» son en realidad respuestas naturales de un sistema con momento angular, cuando entra en juego una acción no coaxial. Por otro, proporciona una caja de herramientas —variables, ecuaciones, configuraciones experimentales— que facilitan el paso de la idea a la prueba, y de la prueba, a la aplicación. Esa combinación rara de claridad conceptual y vocación práctica, hace que el texto funcione a la vez como introducción, como guía de diseño y como hoja de ruta para nuevas líneas de investigación.

Por mi parte, la aportación a este proyecto se puede resumir en una generalización de estos conceptos sobre rotaciones a sistemas basados en materiales que se encuentran en la naturaleza en cualquier estado de agregación de la materia como son los fluidos, tanto en estado líquido como gaseoso. Se trata, en este caso, de introducir nuevos parámetros en las ecuaciones de los fenómenos rotacionales propios de los fluidos, tal como la viscosidad; y también variables que modelicen conceptos típicos de Mecánica de Fluidos como la velocidad material o convectiva, al modo de las ecuaciones de Navier-Stokes. Todo ello introduciendo al mismo tiempo variables termodinámicas como son la presión y la temperatura. El resultado produce la posibilidad de modelización de un gran número de fenómenos rotacionales que observamos en la naturaleza, donde cabe destacar un fenómeno de gran importancia como es la Turbulencia, que aún está siendo investigado sin que exista un modelo definitivo aceptado universalmente.»

El lector que cierre estas páginas dispondrá de una brújula: Sabrá que la no coaxialidad no es un atributo geométrico, sino una característica que puede definir por completo la evolución de un sistema rotacional. Comprenderá que el momento angular no solo «se conserva», sino que también interactúa con nuevas acciones para reorientar el movimiento resultante. Y, sobre todo, habrá visto que es posible —y útil— describir estos fenómenos con ecuaciones claras, ensayos replicables y aplicaciones tangibles. La Teoría General de Interacciones Dinámicas no plantea un callejón sin salida, sino una puerta abierta: una invitación a experimentar, a diseñar mejor y a leer de otra manera lo que hace un cuerpo cuando gira y, además, es empujado en otra dirección.

En suma, este libro propone un cambio de perspectiva que respeta los fundamentos de la dinámica y, simultáneamente, los enriquece para un conjunto de situaciones claves en la ciencia y la ingeniería. Quien busque razones para adoptar esta mirada, encontrará aquí argumentos físicos, demostraciones experimentales y posibilidades tecnológicas. Quien desee comunicarla, hallará imágenes potentes, ejemplos claros y un relato compacto. Y quien pretenda prolongarla, dispondrá de hipótesis contrastables y de una metodología que anima a seguir explorando. Esa es la promesa y la contribución de la TID: convertir la aparente rareza de las interacciones no coaxiales en una herramienta científica comprensible, predecible y útil.

Esta es la aportación y el testamento científico de Gabriel Barceló para la ciencia, tras sus muchos años de pertinaz y constante investigación, sin recursos ni ayudas, solo con medios propios, ha generado una verdadera revolución científica y tecnológica, en la mecánica y en la dinámica rotacional, que supone un cambio radical del pensamiento, y un avance inesperado en el conocimiento científico.

Arturo Rodriguez Palenzuela

Investigador. Ingeniero Industrial.

arturorp62@hotmail.com

 

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